Consejos para proteger la casa de una ola de frío

Según las últimas previsiones meteorológicas de la AEMET (Agencia Estatal de Meteorología), España se encuentra a las puertas de una ola de frío invernal, que puede traernos temperaturas por debajo de cero grados, heladas y nieve. ¿Cómo podemos proteger la casa de una ola de frío de estas características? Te lo explicamos en este artículo.
Proteger la casa de una ola de frío

2022 fue uno de los años más cálidos de los que se tienen registros en España. La media de temperatura durante todo el año fue de 15°C, según datos publicados por la Agencia Estatal de Meteorología. En contraste con este dato y según previsiones de la Agencia, en estos días y las semanas que vienen España podría registrar valores mínimos, por debajo de los habituales en estas fechas.

Toca proteger la casa de una ola de frío, ya que los cambios bruscos de temperatura y los temporales pueden causar daños graves en las viviendas. Para evitar este tipo de incidentes, el equipo de Asistencia de Hogar de Allianz Partners comparte una serie de consejos que nos serán muy útiles.

Las heladas, el causante de daños más común

Según explican desde Allianz Partners, las zonas de la vivienda que son más propensas a sufrir daños por heladas son aquellas expuestas al exterior, como la cubierta, el tejado, o el patio. Aclaran que “con el peso del agua congelada o el cambio brusco de la temperatura sobre los materiales, se producen grietas que, cuando llega el deshielo, permiten que la humedad entre en la vivienda y causan aún más daños”.

Por ello, es importante conocer los elementos empleados en la construcción exterior de la vivienda. Uno de los más importantes es el llamado índice de heladicidad, que atiende a la porosidad de los materiales y, por tanto, a su resistencia a las heladas. Es importante que nos aseguraremos de que el índice de los materiales de la vivienda esté alineado con la temperatura y la climatología de la zona donde nos encontramos, para evitar daños sorpresa.

Otro daño muy común que generan las bajas temperaturas en las viviendas son los daños causados por el hielo en las tuberías. Juan Luis Pérez-Cejuela responsable de Asistencia Hogar de Allianz Partners, indica que “al estar las conducciones de agua de la casa -tuberías de alimentación- llenas, si la temperatura desciende a nivales muy bajos, pueden llegar a helarse”.

Según explica Pérez-Cejuela, si se da esta situación pueden ocurrir dos cosas: que la tubería se quiebre o, en el mejor de los casos, que se descongele el agua sin causar daños. Bajo ningún concepto la solución pasa por calentar las tuberías con agua caliente para provocar la descongelación, ya que el cambio brusco de la temperatura puede romper la tubería y causar daños, no solo en la conducción sino también en el interior de la vivienda.

Atención al pedrisco y a las granizadas

El pedrisco y el granizo tienen una gran capacidad de causar daños en un corto espacio de tiempo. En este sentido, lo que aconsejan desde Allianz Partners es “proteger las zonas que puedan ser dañadas con plásticos, y que estos amortigüen el efecto tanto del frío como del impacto”.

Acciones para proteger la casa de una ola de frío

Allianz Partners nos da una serie de consejos para evitar los daños que las heladas, el granizo y otras inclemencias del tiempo puedan causar en nuestras viviendas. Esto es lo que deberíamos hacer para proteger la casa de una ola de frío:

  • Asegurarnos de que la cubierta de la vivienda está en buen estado. Deben revisarse tanto la impermeabilidad del tejado (tela asfáltica o similar), como la situación externa de la cubierta (tejas, pavimento, etc.).
  • Constatar el buen mantenimiento del solado o cementado de lugares externos. Si es posible, confirmar que el índice de heladicidad de los materiales es adecuado a la meteorología de la zona.
  • Mantener siempre que sea posible cerradas puertas y ventanas para evitar daños por filtraciones, especialmente en temporada de tormentas.
  • Abrir con regularidad los grifos de la casa, de esta manera el agua se mantendrá circulando y se puede evitar, en parte, la posibilidad de heladas.
  • Comprobar si las tuberías de la casa, al menos las que vayan vistas, tienen un forro o funda protectora de material aislante. Esto evitará que se hielen con facilidad.
  • Mantener en buen estado, con sus revisiones periódicas, las antenas, chimeneas y elementos adheridos a cubiertas o muros de la vivienda.
  • De la misma forma, en comercios y similares, deben estar correctamente fijados a las paredes o fachadas los toldos, carteles, banderolas, etc.

“Somos testigos de cómo está cambiando nuestro clima, debemos ser conscientes de que situaciones extremas, como las olas de frío y las olas de calor, pueden ser cada vez más comunes en el futuro. Si somos conscientes de los posibles daños que puedan sufrir nuestras viviendas, podremos prevenirlos para evitarnos disgustos”, asegura Juan Luis Pérez-Cejuela.